En esta sección damos la bienvenida a La Zarzuela. No, no me refiero al palacio, sino al género teatral músico-escénico español. La zarzuela nos irá acompañando durante estos meses, compartiendo su sensibilidad y despertando los ritmos olvidados que permanecen latentes en nuestra sangre.
No es porque sea subjetivo (que también) pero la zarzuela es un género precioso al que debemos ofrecer más visibilidad y dar a conocer. Dicho esto, empezamos:
¿QUÉ ES LA ZARZUELA?
La zarzuela es el género teatral lírico español. Se caracteriza, a diferencia de la ópera, por alternar partes habladas y cantadas. La zarzuela es similar a lo que podríamos llamar “musical de Broadway”, pero con un estilo más lírico y una temática diferente.
La zarzuela nace a mediados del siglo XVII y, tras varios vaivenes de la lírica en España (italiana, sobre todo), en el siglo XIX con la llamada Zarzuela Restaurada toma la forma que conocemos hoy en día.
Distinguimos dos tipos: el género chico y el género grande. La diferencia principal es la duración, de un único acto el género chico, y de 2 o 3 actos el género grande. La zarzuela suele ser de carácter alegre, predominando los enredos románticos.
Principalmente de carácter madrileño, se extendió por toda la península dando lugar a diversas zarzuelas de cada comunidad autónoma. Del mismo modo, gracias a las compañías teatrales que realizaban sus giras en el extranjero , la zarzuela alcanzó gran popularidad en Latinoamérica.
La zarzuela está formada por el libreto y por la música. El libreto es el texto que contiene los diálogos y la letra de las canciones, a veces en verso y otras en prosa. De este libreto se encarga el escritor, que escribe la obra de teatro. La música corre a cargo del compositor que pone la banda sonora. La forma de proceder varía con cada zarzuela, normalmente es un proceso de comunicación mutuo entre escritor y músico. Lo más habitual es poner música a un libreto ya escrito y, por ejemplo, en otros casos (bastantes menos) el mismo músico es quien escribe también la historia y los diálogos.
DESMINTIENDO MITOS
La zarzuela es el género del pueblo. A pesar de que naciera como entretenimiento para la corte en 1657, a partir del siglo XIX tomó otro papel. La zarzuela servía como entretenimiento de las clases medias, relataba historias cotidianas y cercanas a la gente; y reflejaba una sociedad humilde y unas costumbres locales. También servía como crítica social y política.
Muy lejos de la realidad, la zarzuela no es de derechas, ni franquista, ni ha tenido nunca nada que ver con el régimen. La zarzuela fue otra víctima más de la dictadura, que se usó para dar una imagen de España costumbrista y exaltar el patriotismo.
La zarzuela nació en 1657, y la zarzuela restaurada que conocemos hoy en día, es así desde 1851. No fue un invento del régimen, sino una manipulación.
Gobierno tras gobierno, la zarzuela nunca ha estado exenta de censura, ya sea para tratar temas sicalípticos o para criticar a cierto rey… La zarzuela suele contar con dobles sentidos y ser más pícara y picantona de lo que parece, pero ese tema saldrá para otro número.
EJEMPLO
Ahora que ya sois unos expertos en zarzuela, pasamos a la práctica, y, aprovechando la temática central de Halloween para este mes, qué mejor manera de hacerlo que con una danza macabra, de la zarzuela “El niño judío”, estrenada en 1918 y compuesta por Pablo Luna.