En este artículo hablaremos sobre la tecnología digital en la industria del arte y en otros aspectos, como la construcción.
En la industria del arte, la tecnología está muy presente. Un ejemplo de ello es la industria de la animación. Aunque la técnica tradicional sigue en uso, cada vez es más frecuente la animación digital, y cada vez se van desarrollando nuevas técnicas para facilitar el trabajo y los cotes de producción. En la actualidad, obtener un resultado funcional en cualquier forma artística es más accesible que nunca. Webs como Face.Co permite crear avatares con dibujos vectoriales, pero la creciente cantidad de inteligencias artificiales ha permitido que los resultados obtenidos sean cada vez mejores y más fáciles de crear.
Sin embargo, aunque parezca que hablar de tecnología y arte en el mismo contexto pueda devaluar el mérito y esfuerzo, sobre todo cuando hablamos del uso de inteligencias artificiales, no hay que olvidar que realmente todo esto son herramientas que utilizamos y que el arte en sí mismo no es la técnica, como sí el espíritu con el que se desarrolló, la intención, el mensaje. Sin ir muy lejos, la revolución industrial produjo un efecto similar y eso solo ha permitido crear y mejorar nuevas manifestaciones artísticas como la fotografía, el cine, la escultura tradicional y el nacimiento de la escultura 3D. La evolución del arte está ligada a la tecnología que lo permita. Podríamos incluir a los videojuegos como un ejemplo más de arte ligado a la tecnología.
Hoy en día podemos ver cómo la tecnología ha hecho las cosas realmente más fáciles. En las construcciones ha ayudado a que tarde menos tiempo o a que las cosas se hagan de una forma más segura y/o estética, como resultado de la Revolución industrial. Esto favoreció una nueva forma de entender la arquitectura, sin embargo, realmente, el propio desarrollo de la cultura humana está ligada a la tecnología. Desde la invención del hormigón, hasta los softwares 3D como AutoCAD para el desarrollo industrial.
Podemos ver también que la tecnología ha ayudado en el sector del cine, ya que gracias a esta han mejorado las técnicas de filmación, la calidad de imagen, nuevas formas de contar historias e incluso en los efectos especiales, lo que, lejos de quitar formas de empleo, ha creado nuevas especialidades. Estos, aunque no todos, pero sí una gran parte en la industria actual del cine, se hacen mediante el uso de ordenadores, incluyendo la edición y montaje de películas.
Por otra parte, otro aspecto relacionado al arte digital, que ya hemos mencionado anteriormente, es el mundo del 3D digital, que evoluciona continuamente con nuevas técnicas y con softwares más complejos y potentes, permitiéndonos un amplio abanico de posibilidades en ingeniería, salud, cine, videojuegos, publicidad, incluso en criminalística para estudiar y recrear casos con el fin de resolverlos.
En la actualidad, uno de los temas más recurrentes son las IAs y sus usos en diferentes ámbitos, pues están suponiendo una revolución donde antes solo podíamos echar imaginación, y aunque haya un potencial controvertido, es innegable que está por todas partes, incluso si desconocemos de su presencia, ya que estas no solo se limitan a dispositivos como Alexa ni chats de texto como ChatGPT.